
Lo queremos de formas muy distintas. Vos sos la novia. Yo soy su amiga.
El amor que tú le das es de pareja. El cariño que yo le tengo y le demuestro es de amistad, amistad de las buenas, de las fuertes.
Estuve antes de ti y seguramente estaré a su lado cuando tú ya no estés porque, para bien o para mal, la amistad suele durar más que el amor.
No soy tu enemiga, no tengo ninguna mala intención. Me alegra inmensamente verlo feliz, verlo enamorado como no lo había visto antes.
Es complicado adaptarse, claro. Yo vivo un momento difícil, un momento donde lo he necesitado y lo necesito a mi lado porque confío y me refugio en su amistad. Justo en la mitad de ese momento te conoce y se enamoran. Por obvias razones se aparta, se aparta para estar contigo y experimentar esa deliciosa y egoísta etapa al empezar una nueva relación....etapa en la que uno quiere pasar todo el tiempo posible con esa otra persona...en la que uno no suele tener tiempo ni voluntad para nadie más. Los amigos, por lo general, llevamos del bulto en esa situación. El tiempo y las actividades que compartíamos juntos hay que repartirlo y reordenarlo ahora que hay un tercero (muy importante) dentro de la ecuación. Yo no tengo problema con eso. No soy celosa con mis amigos. Entiendo (y entenderlo no signifique que no me afecte) perfectamente que se aleje, que ya no esté para mí de la misma forma, que ya no cuente con la misma libertad y disposición. Me alegra, te lo repito, verlo tan contento aunque eso signifique reducir los momentos juntos. Nos vemos menos, por eso me emociono tanto cuando lo veo, por eso lo abrazo, le tomo la mano, le sonrío. Yo tengo pocos amigos y los que tengo los valoro mucho. Soy poco expresiva pero con él me nace ser cariñosa y no tengo problema con eso. Lo adoro, he sido afortunada al encontrarlo....igual que lo has sido tú.....pero lo que encontramos en él es diferente. Digamos que yo elegí el camino de la izquierda y vos el de la derecha. Nos llevan a sitios muy distintos dentro de su cabeza y sus afectos y precisamente por eso no hay de qué preocuparse.
No te dejes llenar la cabeza de cucarachas, querida. No dejes que unos celos sin fundamentos arruinen el momento tan bonito por el que están pasando ni lo pongas a elegir entre las 2 porque será un error enorme. ¿Que lo abrazo, que le bailo, que lo piqueo, que le sonrío, que lo acaricio? ¡pues claro! si somos buenos amigos y lo quiero como a pocos. Me siento tan cómoda con él y tan segura de que lo que hay entre los dos es sólo amistad que no tengo problema en demostrarle mi afecto en público y/o delante de ti. No te empelicules que eso sólo nos hará daño a los 3. Yo respeto tus espacios, respeta tú los míos y convéncete de una vez por todas que lo único que hay entre los dos es un cariño grande, inocente, despreocupado. Lo que hay es una de esas amistades que en verdad valen la pena.
Take it easy.
D
27/6/11